El número de personas fallecidas por el terremoto en Turquía y Siria, de magnitud 7.8, va en incremento, al sumar ya más de 7 mil decesos; los equipos de rescate van contrarreloj en busca de sobrevivientes entre los escombros, como ocurrió en el caso de una niña que protegía con su brazo la cabeza de su hermanito.
El video fue compartido por la activista Shehr Bano, en su cuenta de Twitter (@OfficialShehr); en las imágenes se observa a la menor debajo de los escombros, quien tiene, a su lado, a su hermano bocarriba y cubriéndole el rostro con su brazo derecho.https://2381c6367cb6c2917bff65fa2751cd9f.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.html?n=0
“Señor, si nos salva a mí y a mí y a mi hermano… seremos sus esclavos por el resto de nuestras vidas”, es como se habría dirigido la menor hacia el rescatista que se encuentra con ellos.
Horas después, compartió en sus redes sociales que los hermanos pudieron ser rescatados y se encontraban a salvo tras el sismo que se suscitó este lunes 6 de enero en Turquía y Siria.
De acuerdo con medios locales, la niña de 7 años protegió con su brazo a su hermanito por alrededor de 17 horas antes de ser auxiliados por equipos de emergencia.
Horas después del terremoto que sacudió a Turquía y Siria, la comunidad internacional se movilizó por territorio turco enviando rápidamente ayuda de urgencia. Francia, Alemania y Estados Unidos también prometieron socorrer a las víctimas sirias, pero sin enviar inmediatamente la asistencia.
Ayudar a la población siria “en el contexto político de un régimen que desencadenó una guerra civil que dura desde hace 10 años” es complicado, opinó Laurence Boone, secretaria de Estado francesa para Europa ante la Cámara baja de Francia.
“Siria sigue siendo una zona oscura, desde un punto de vista legal y diplomático“, estima Marc Schakal, responsable del programa centrado en Siria de Médicos Sin Fronteras (MSF), instando a enviar ayuda “lo antes posible”.